¡¡¡SESIENTEN, COÑO!!!

Sergio Lombardía, Carles Cuevas, José de Diego y María Rayo
¡Atención! ¡Atención! Solo por estar viendo este reportaje es usted sospechoso de un asesinato. Ponga las manos donde puedan verse e identifíquese ante estos cuatro cuerpos representantes de las fuerzas de seguridad del Estado: un policía nacional (Sergio Lombardía), una guardia civil (María Rayo), un mosso d'escuadra (Carles Cuevas —en esta entrevista—/Nico Romero) y un ertzaintza (José de Diego —en esta entrevista—/Jon Hernández ).




Vídeo de presentación de la obra



Nosotros, que nunca estuvimos tan cerca de tomarnos la justicia por nuestra mano, hemos aprovechado la ocasión para invertir el proceso y les hemos sometido a un interrogatorio para que nos expliquen qué es eso de Que nadie se mueva. Aquí os dejamos los testimonios de los actores y de los responsables del texto y la dirección: Jon Plazaola y Esteban Roel.

Empezamos por estos últimos y les
preguntamos ¿por qué este 
texto?

Jon nos cuenta: «Ahora mismo? Porque es necesario. El público necesita imperiosamente reírse, descojonarse, si se me permite, de todo lo que está aconteciendo en este país. Los bancos, los políticos, los empresarios más poderosos tratan de salvar literalmente su culo, de emprender una huida hacia adelante sin mirar atrás y dejando en el arroyo a un pueblo, a familias enteras a las que han chupado más que la sangre. El panorama no invita al humor, ni mucho menos. Pero ahí estamos nosotros y otros muchos como nosotros, paradójicamente con el humor, el humor crítico y ácido, como herramienta para hacer reír a ese pueblo con un código que les permite acercarse al teatro, entenderlo y a la vez concienciarse  Todo eso pasándolo bien y liberándose del oscuro día a día». A esta misma pregunta Esteban nos contesta en el vídeo.


El autor Jon Plazaola
¿Jon, de dónde surge esta obra?

Esteban y los chicos llevaban tiempo dándole vueltas a una buena idea que consistía en hacer una obra con cuatro fuerzas de seguridad del Estado «involucrados» en un crimen. Empezó siendo una sátira sobre las autonomías, algo que al director le llamaba mucho la atención ya que es mexicano. Yo entré en el proyecto porque vieron la necesidad de meter en el grupo a alguien que tradujera todo esto en papel. En seguida Esteban y yo vimos que ahí había mucha más chicha de la que planteábamos en un comienzo. Después de doce versiones de guion, 
esto es lo que hay.




¿Es necesario hoy en día un teatro como este?

  
¿Cómo ha sido el salto creativo de escribir guiones cinematográficos a escribir un texto teatral?
Ha sido una sorpresa para mí. Cuando me metí en este proyecto entré con mucha ilusión, pensando que me metía en un terreno inexplorado. La realidad fue que al final, por el vicio que traemos todos los componentes del grupo, que venimos del cine, el proceso, incluso la forma del texto y la obra propia, adquirieron un claro aire cinematográfico. ¡Coño, que hacemos cine en 3D
jajajajaja..., y se llama teatro!

¿Cómo habéis vivido el salto del circuito alternativo al teatro comercial?

El salto nos ha pillado por sorpresa. Un pequeño formato pasado a uno grande. Hay algo muy curioso: ahora la obra se ve más porque al estar en un espacio más pequeño teníamos la posibilidad de intimar con el público más de cerca pero en Galileo hay más distancia y la gente puede detectar más detalles. Lo que sí que es verdad es que si no fuera por Garaje Lumiere muy probablemente esta obra no existiría porque ellos nos dieron la primera oportunidad. El salto del circuito alternativo al comercial nos ha pillado a todos por sorpresa, dice Carles y continúa diciendo que no es muy habitual que pase y por eso tiene que aprovechar al máximo esta semana que les queda en la Galileo.

¿Qué podéis contarnos de vuestros


personajes en Que nadie se mueva?



Definid en pocas palabras esta obra

Marta: Sarcasmo y respeto.

Sergio Lombardía: Atrevida.

José de Diego: Es la actualidad contada sin tapujos.

Esteban Roel: Carcajadas y carcajadas.

Jon Hernández: Canalla y necesaria.

Carles Cuevas: Es una obra muy gamberra pero tiene mucho por dentro.

Ya sabéis si no queréis acabar en busca y captura, o peor aún, detenidos por uno de ellos y que se disputen tu custodia, ir comprando las entradas ya mismo.


1 comentario:

Anónimo dijo...

yo fui a verla y la recomiendo a todo el mundo risas aseguradas con un mensaje social muy profundo